El bastión de Saint Remy es un edificio de estilo clásico con una gran escalera, un arco del triunfo y una gran terraza en su azotea. Esta estructura monumental se construyó a finales del siglo XIX, y hoy sigue ofreciendo un lugar muy especial para relajarse disfrutando de una espléndida vista de la ciudad.
El bastión recibe su nombre del antiguo barón de Saint Remy, Filippo-Guglielmo Pallavicini. Bombardeado durante la Segunda Guerra Mundial, el monumento fue restaurado hasta recuperar su aspecto original.
Acércate a la Piazza Costituzione, en el distrito histórico de la ciudad para llevarte una buena fotografía de esta imponente estructura. Admira el arco del triunfo situado en lo alto de sus amplias escaleras. El bastión también merece una visita por la noche: su aspecto cambia completamente gracias a la iluminación de las escaleras, bajo el arco y tras las columnas corintias.
Al final de las escaleras se encuentra la gran terraza. Hay un ascensor, si no quieres subir por las escaleras. Es el lugar ideal para contemplar un atardecer inolvidable. También puedes divisar otros monumentos del centro histórico.
Además, la terraza ofrece un espacio cultural, con exposiciones artísticas y otras actividades. Antiguamente se utilizó como enfermería de guerra y sala de banquetes. Mientras disfrutas de una bebida en uno de los abres o cafeterías podrás disfrutar de la cálida brisa mediterránea. Por la noche la zona se anima gracias a la gente de Cagliari, que sale a pasear por los alrededores.
El bastión de Saint Remy se encuentra en el casco antiguo de Cagliari, a varias manzanas de la costa en dirección noreste. Puedes llegar en autobús a alguna de las numerosas paradas cercanas a este famoso monumento del distrito Castello. Está a solo diez minutos a pie de la estación de tren principal de la ciudad.
La terraza del bastión abre durante todo el año, mañana y tarde, y es gratuita.