Durante tu estancia en Bilbao, es posible que escuches que la gente se refiere al casco antiguo de la ciudad también como las Siete Calles o, en vasco, Zazpikaleak. Estos nombres se refieren a las calles medievales que conforman el núcleo de este barrio.
Le llames como le llames, el casco antiguo es un lugar maravilloso donde pasar algunos de los mejores momentos cuando viajes a Bilbao. Recorre su laberinto de pintorescas calles, en su mayoría peatonales, y déjate sorprender por los muchos lugares interesantes que te encontrarás.
Los domingos por la mañana tienes una cita en el mercadillo de la Plaza Nueva para buscar recuerdos únicos, aunque en realidad esta plaza pública es uno de los lugares más populares del casco antiguo todos los días de la semana. Además de ser un hermoso ejemplo del estilo neoclásico, es conocida por sus cafeterías, bares y restaurantes. Desde luego, no puedes abandonarla sin unirte al ambiente alegre que la impregna y probar unos buenos pintxos.
A poco menos de cinco minutos a pie al sur de la plaza se encuentra la magnífica catedral de Santiago. Su hermosa fachada es un excelente ejemplo de la arquitectura gótica del sigloXIV. En su interior te esperan un sinfín de detalles y capillas que podrás admirar en la sosegada atmósfera de un lugar de culto.
Al finalizar, puedes completar tu visita cultural con uno de los excelentes museos que se encuentran en el casco antiguo. Si quieres conocer la historia de Bilbao, puedes entrar en el Bilboko Euskal Museoa o hacer un viaje al pasado a través de los restos arqueológicos del Arkeologi Museoa. Un poco más al este está el peculiar Museo de Pasos, dedicado al patrimonio artístico y religioso bilbaíno en torno a la Semana Santa.
El edificio de la biblioteca central de Bidebarrieta, del sigloXIX, es uno de los más excepcionales de la zona. Seguramente te llamará la atención su bella fachada nada más acercarte, pero te recomendamos que no dejes pasar la oportunidad de entrar para ver su verdadero esplendor.
Los puntos más destacados del casco antiguo de Bilbao se encuentran en la orilla oriental del río Nervión. Si no sabes por dónde empezar a explorar la ciudad, lo mejor es que te dirijas a la Plaza Nueva, que se puede considerar como el centro del casco antiguo de Bilbao y está a solo diez minutos a pie al este desde la estación de tren principal.