A veces puede parecer que las playas baleares no son el mejor destino para las personas que buscan escapar de las multitudes, pero la cala Codolar, en la pequeña isla de Formentera, es la excepción. Escondida bajo un faro de mediados del sigloXIX a los pies de Pilar de la Mola, es posible que puedas disfrutar de esta playa en solitario en tus viajes a Formentera. Si te atreves a bajar por la escalera del escarpado acantilado rocoso, podrás acceder a lo que podría ser tu playa personal en el Mediterráneo, ya que es muy improbable que encuentres otras personas.
Deja el coche en el faro de la Mola, y aprovecha para detenerte para ver el homenaje a Julio Verne, cuya novela Héctor Servadac se inspiró en la vista del faro blanco sobre los acantilados grises. A continuación, inicia con cuidado el descenso por el acantilado, y no dejes de detenerte de vez en cuando para apreciar las vistas del mar rompiendo contra las rocas.
Seguramente te sorprenderá encontrar también aquí los pintorescos cobertizos con botes de pesca que dan un encanto de tradición a esta cala. Practica la escalada trepando por la escarpada roca que conduce al faro o dirígete al agua con unas gafas de buceo para ver las numerosas especies de peces que habitan en la zona.
Para aprovechar al máximo esta escapada, te recomendamos llevar un pícnic o algún aperitivo informal y algo para beber y convertir las amplias rocas planas de la cala en tu propio chiringuito privado. Con solo 25metros de largo y 5de ancho, no te costará sentirte en tu propio trocito de cielo.
Si quieres visitar la cala Codolar y te encuentras en otra isla, primero tendrás que ir al puerto principal de Ibiza, desde donde sale un ferri cada pocos minutos a Formentera. Una vez en la isla, la mejor forma de llegar a la cala es en coche. El trayecto hasta el faro de la Mola te llevará 30minutos desde la terminal de ferri y 20desde el centro de Formentera. Encontrarás aparcamiento limitado cerca del faro y tendrás que hacer el resto del recorrido a pie. El descenso a la playa es un tramo de aproximadamente 160metros. Ten en cuenta que no es accesible para personas con movilidad reducida. De hecho, te recomendamos que lleves calzado de senderismo. No hay restaurantes cerca y la cala no cuenta con socorristas.