¡¡¡UNO DE LOS JARDINES PRIVADOS MAS BELLOS DEL NORTE DE ESPAÑA!!!
Cercana a la ciudad de Santander, con las ventajas que esto conlleva y al mismo tiempo aislada en plena naturaleza. Es un lugar idílico para descansar con la seguridad tan importante hoy en día de poder disfrutar, si es lo que se busca, de total intimidad. Forma parte de una pequeña zona residencial cuyas escasas casas tienen todas grandes fincas y entradas independientes.
En Cantabria, a nueve kilómetros de Santander, bonita casa de campo de 80 m2, ubicada en una gran finca particular de 5.000 metros cuadrados considerada por paisajistas y profesionales de la jardinería como un ejemplo de belleza y armonía.
Totalmente integrada en el paisaje, su estilo nos recuerda a la arquitectura estadounidense de principios del S.XX cuyo mayor exponente es el célebre arquitecto Frank Lloyd Wright. Posee todas las comodidades para una feliz estancia; chimenea en el salón comedor, cocina bien equipada y luminosa, habitaciones con grandes ventanas y preciosas vistas, y un cuarto de baño de ensueño con jacuzzi y ducha aparte. Todo está en perfecto estado de conservación orden y limpieza. De estilo sencillo y amable, sus grandes ventanales y lucernarios conectan a la perfección la casa con el exterior, acercando la naturaleza al interior de la vivienda. El medio ambiente y el edificio pasan a ser una sola cosa, y los árboles se convierten en elementos que están en armonía con el espacio interior en que vivimos. Es lo que se ha definido como Arquitectura Orgánica . LA CASA consta de: dos habitaciones, un salón comedor con sofá-cama para dos personas, chimenea, televisión, equipo de música y preciosas vistas al cuidado jardín inglés; un dormitorio con cama de matrimonio, otro dormitorio con dos camas individuales que se pueden juntar para hacer una cama grande, ambas con vistas a la finca. Vestidor, baño con jacuzzi y ducha independiente, TV y música. LA FINCA, privada y reservada al uso exclusivo del viajero, de 5000 metros cuadrados de extensión, posee un maravilloso jardín con bosque autóctono propio, cientos de árboles, mas de 60 variedades diferentes, flores, rocas, frutales, una cueva, bucólicos e íntimos rincones, barbacoa, dos ambientes de comedor exterior con sus mesas, ducha de jardín y tumbonas. La entrada la finca es a través de una alameda privada que da paso al aparcamiento para varios coches y a la casa.