El castillo ocupa una gran parte del centro histórico y es una de las atracciones más populares de la ciudad. Alberga una de las principales galerías de Dresde y dispone, además, de una impresionante colección de joyas arquitectónicas. Tras la reconstrucción posterior al bombardeo de Dresde en 1945, el castillo se convirtió en el Palacio de las Artes y las Ciencias. Observa las monedas antiguas, los establos del palacio y el mural de 102 metros que alberga el complejo.
El castillo de Dresde es una de las estructuras más antiguas de la ciudad, pues cuenta con más de 400 años de historia. La grandiosa residencia real cuenta con una gran variedad de estilos arquitectónicos, desde el estilo románico original hasta las diferentes modificaciones de estilo renacentista y barroco. La reconstrucción, en la que se añadieron muchos elementos modernos, se inició después de la Segunda Guerra Mundial y concluyó en 2013. Accede al complejo por la entrada para visitantes del patio y dedica un momento a contemplar el techo. El techo teselado de cristal protege el patio de los elementos y deja pasar la luz natural que ilumina el suelo adoquinado.
Visita el Gabinete de las Monedas, donde se exponen monedas antiguas, y la Colección de Grabados, Dibujos y Fotografías, que es una de las más antiguas de su clase en Alemania. Las Bóvedas Verdes son dos galerías en las que se exhiben las obras de arte más impresionantes y lujosas del museo, incluidas joyas históricas y paredes de espejo. Haz una parada en la lujosa Cámara Turca, en la biblioteca de arte y en la armería, antes de explorar los terrenos del castillo.
El Fuerstenzug ("Desfile de los Príncipes") es un mural gigantesco de 102 metros formado por unos 25.000 azulejos de porcelana pintados. Esta obra monumental es uno de los elementos más destacados del castillo. Recorre el Langer Gang, un largo corredor abovedado, hasta el enorme patio donde se encuentran los antiguos establos.
El castillo de Dresde cierra los martes y es de pago. Es necesario adquirir una entrada adicional para acceder a las Bóvedas Verdes. El edificio se sitúa en el centro de Dresde y está muy bien comunicado mediante tranvía o autobús. También encontrarás aparcamiento en las inmediaciones.