Cracovia es conocida por su turbulenta historia como una de las ciudades más antiguas de Polonia. Sus museos, con sedes en antiguos castillos y decadentes palacios renacentistas, están repletos de tesoros reales y recuerdos del Holocausto. Sin embargo, Cracovia vive el presente tanto como el pasado, gracias a su floreciente escenario de arte contemporáneo, sus mercados de fin de semana y su animada vida nocturna.
La ciudad tiene más de 750 años y, durante cinco siglos, fue la capital de Polonia. Las sucesivas generaciones de monarcas construyeron castillos y catedrales además, infundieron un aire regio que sigue siendo palpable hoy en día.
Moverse por ella es sencillo gracias a una red fiable de tranvías y autobuses. Muchas de las atracciones principales se sitúan dentro del casco antiguo (Stare Miasto), compacto y fácil de recorrer a pie. Visita la decorativa Basílica de Santa María, que alberga uno de los altares más espectaculares de Europa. Pasea por los jardines Planty, que se sitúan donde antaño se hallaban las murallas del casco antiguo. La puerta a este, la Barbacana, es una de las vistas más impresionantes del parque.
El castillo de Wawel se alza sobre la ciudad. Este castillo ha protegido Cracovia de los invasores desde el siglo XVI y, hoy en día, alberga majestuosas salas, muestras de opulentas joyas y colecciones de armaduras. Mientras estés aquí, visita la monumental catedral de Wawel y la Cueva del Dragón, una cueva de piedra caliza donde cuenta la leyenda que antaño vivía un dragón.
La historia de Cracovia se entrelaza con la de su comunidad judía. Aprende sobre la historia en la Fábrica de Oskar Schindler, que alcanzó la fama como tema de La Lista de Schindler, de Steven Spielberg. La antigua fábrica se ha convertido en un completo museo, que cuenta con inolvidables exposiciones sobre el Holocausto. Dirígete al Museo Judío de Galicia, donde las fotografías narran la historia de lo que implica ser judío en la Cracovia actual.
En verano, los parques urbanos de Cracovia cobran vida con conciertos y festivales al aire libre. Haz picnic en el parque Jordan o súbete a un crucero por el río Vístula, que atraviesa la ciudad. En invierno, disfruta de Cracovia cubierta por una capa de nieve que dota a los edificios del casco antiguo de un aire romántico.