Contempla la fachada del Hotel de Ville y fíjate en la detallada talla de las estatuas y en la oscura e imponente torre del reloj. En su interior, caminarás bajo el brillo de lujosas arañas de cristal. Observa también los techos, adornados con pinturas exquisitas, y los trabajos de algunos de los artistas más célebres del país.
Su construcción original se remonta al siglo XVI, durante el reinado del rey Francisco I. Sin embargo, la estructura sufrió grandes daños durante la Comuna de París de 1871. Los arquitectos Theodore Ballu y Edouard Deperthes restauraron el edificio varios años después y lo decoraron con un estilo neorrenacentista que recuperaba todo el esplendor del original. Este impresionante ayuntamiento, sede del consejo municipal, alberga también exposiciones locales.
Desde la plaza situada delante del ayuntamiento podrás contemplar como se merece la larga fachada principal. Los muros de color crema están adornados con filas de ventanas cuadradas sobre las entradas arqueadas. Acércate para ver mejor las 108 figuras de piedra que representan las figuras de parisinos ilustres. Por encima de ellas se eleva la emblemática torre del reloj, de piedra oscura. El reloj se encuentra rodeado de varias estatuas femeninas que simbolizan el río Sena y la ciudad de París.
Ya dentro, sube la amplia escalera que lleva al salón de baile. El salón de actos es una réplica del Salón de los Espejos de Versalles, y recibe la luz de gigantescas arañas de cristal. Consulta las exposiciones que se organizan con regularidad durante todo el año, y que incluyen arte nacional e internacional. Pregunta en recepción para saber cuáles coinciden con tu visita.
El Hotel de Ville está situado en el centro de París, cerca de las riberas del río Sena. Si tu hotel está cerca, puedes caminar hasta allí, o puedes ir en metro. Hay que pagar la entrada, pero es muy asequible. Te recomendamos reservar la visita guiada con antelación. Y, ya que estás allí, disfruta de la plaza del ayuntamiento: si vas en invierno podrás patinar en la pista de hielo y, si eliges el verano, disfrutarás de una playa artificial, perfecta para tomar el sol o jugar a fútbol o voleibol.