El jardín botánico polar alpino es conocido como el jardín botánico más septentrional del mundo, un mérito que representa un importante valor añadido en los viajes a Tromsø. En él crece una singular diversidad de vida vegetal que debe soportar aproximadamente siete meses en los que la nieve envuelve Tromsø en un blanco manto. Esta es una oportunidad única para ver plantas nativas de las capas de hielo de Svalbard, un remoto terreno formado por gélidos glaciares.
Uno de los atractivos de este jardín botánico son sus extraordinarias vistas de las montañas que enmarcan la ciudad. Si tu visita coincide con el principio del verano, tendrás la suerte de ver espectaculares rododendros blancos, rojos, amarillos y morados, además de la gran colección de plantas exóticas y árticas de todo el hemisferio norte.
A principios de primavera, la gran atracción es la floración de la impresionante saxífraga púrpura. Otras variedades árticas comunes son, por ejemplo, las pulsatilas y las plantas pulviniformes de color amarillo. También encontrarás flores del Himalaya, como la amapola azul tibetana. Muchas de las especies dominantes florecen a principios de mayo, cuando todavía quedan algunos restos de nieve.
Son muy hermosas las bayas blancas y rosadas de los arbustos serbales, que pertenecen al género sorbus. En el rocoso entorno crecen diferentes variedades de arbustos y plantas de gran follaje, algunas de las cuales alcanzan su esplendor en pleno invierno. El jardín botánico polar alpino alberga 25colecciones individuales, todas ellas con especies de plantas singulares y hermosas procedentes del círculo ártico, el Himalaya y Sudamérica, entre otros lugares.
Desde mediados de mayo hasta finales de julio, el sol no se pone en el horizonte en Tromsø. Este fenómeno, conocido como el sol de medianoche, provoca que muchas de las plantas experimenten un mayor crecimiento durante estos meses. De este modo, al llegar el verano se crea un colorido mosaico de flores y plantas. En invierno también es muy hermoso ver los arbustos dispersos que sobresalen de las profundas capas de nieve blanca.
El jardín botánico polar alpino se encuentra a aproximadamente cinco kilómetros del centro de Tromsø. Se puede acceder a él gratuitamente y está abierto todos los días del año. La animada ciudad de Tromsø es un buen lugar donde alojarse y en ella encontrarás numerosos hoteles y hostales.
El jardín cuenta con miles de especies de plantas internacionales, aunque tienen una relevancia especial las plantas y flores únicas de las regiones polares.