Crystal Cove es una magnífica reserva natural costera que resulta perfecta para disfrutar de rutas de senderismo, haciendo picnic, tomando el sol y de otras muchas actividades.
El parque se divide en dos zonas: la litoral, con cinco kilómetros de playas impolutas y un parque marino protegido muy popular entre los amantes del submarinismo, el buceo, el surf y la natación, y la forestal, que está libre de la acción del hombre y que ocupa una superficie de 971 hectáreas inmediatamente detrás de la playa. En esta última zona encontrarás rutas de senderismo, lugares de acampada y vistas de las montañas. Existe la posibilidad de comprar un pase de estacionamiento para todo el día para poder dejar el coche en alguno de los tres aparcamientos públicos de la zona y tomarte así todo el tiempo que necesites para explorar.
Para elegir qué ruta seguir, pídele un mapa a algún guardabosques en el centro de información del parque. Las rutas de baja dificultad pasan por numerosos miradores que dan al océano. Puedes recorrer a pie todo el perímetro del parque haciendo la ruta de dificultad alta, de 17 kilómetros. Además, los aficionados a la bicicleta de montaña y a la equitación tienen para elegir varios caminos de tierra que serpentean por la zona. Además, hay lugares de acampada básicos situados monte adentro, en la que se conoce como la “zona profunda” del parque. Solo se recomienda llegar hasta esos parajes si se está en buena forma, pues para ello hay por delante una extenuante caminata de varias horas. Además, hay que ir bien provisto de todo tipo de provisiones y agua. Como alternativa, también hay lugares de acampada frente al mar para montar la tienda de campaña y aparcar la caravana que resultan fácilmente accesibles y disponen de aseos y duchas compartidos de pago, aunque económicos.
El rincón más conocido de Crystal Cove es Historic District, un pueblo costero con casas de madera de estilo rústico playero, un restaurante, un bar y una tienda de recuerdos. Sus más de 40 casas de madera se construyeron entre los años veinte y treinta. Como curiosidad, una de ellas aparece en la película de 1988 Eternamente amigas, protagonizada por Bette Midler. Cerca de la mitad de ellas se han rehabilitado como residencias de alquiler vacacional y cuentan con una gran demanda durante todo el año. Por tanto, si quieres reservar una, deberás hacerlo al menos con siete meses de antelación. Si haces una excursión de un día y vienes el segundo sábado de mes, podrás realizar una visita guiada por el pueblo. Las reservas se hacen en la oficina de información turística.
Crystal Cove se encuentra a poca distancia en coche de otros importantes enclaves turísticos, como Huntington Beach y Newport Beach.
