El histórico Zoo de Filadelfia es un parque compacto de 17 hectáreas donde viven 1.300 animales en 15 hábitats permanentes. La fauna africana y australiana comparte espacio con mamíferos, aves y reptiles norteamericanos. El programa de cría especial y la política medioambiental del zoo tienen como fin ofrecer protección para las especies en peligro de extinción.
Pese a sus más de 150 años de antigüedad, el zoo se ha adaptado a los tiempos al adoptar estándares modernos, como la creación de hábitats por los que los animales pueden moverse libremente. Entre ellos se encuentran Jungle Bird Walk, dedicado a las aves, y Monkey Junction, para los primates. Además, ofrece un programa infantil que inculca activamente un estilo de vida respetuoso con el medio ambiente.
Podrás ver hábitats naturales como el exuberante First Niagara Big Cat Falls, donde podrás observar grandes felinos, y el abrupto Carnivore Kingdom. Mantén los ojos bien abiertos ante los leones blancos de Timbavati, que se creen extinguidos en la naturaleza. El Zoo de Filadelfia se ha labrado una reputación por conseguir criar con éxito especies en peligro de extinción cuya reproducción en cautividad resulta dificultosa. Conoce a Vinkel, la leona que en 1994 fue madre del primer cachorro de león blanco nacido en suelo estadounidense. Los orangutanes asiáticos, los osos polares del Ártico, las tortugas de Las Galápagos y las autóctonas tortugas de espalda de diamante son otras especies amenazadas que podrás ver en el zoo.
Los niños de menos de 13 años pueden ayudar a cuidar de animales de granja en la atracción de interior y exterior KidZooU. Los días claros, puedes disfrutar contemplando el zoo y Filadelfia a vista de pájaro desde el enorme globo Zooballoon.
El Zoo de Filadelfia se encuentra a seis kilómetros al noroeste del centro de la ciudad, en la orilla oeste del río Schuylkill. Para aparcar solo hay estacionamiento de pago, de precio bastante elevado, a lo largo de Girard Avenue o 34th Street. Una opción más económica es utilizar el autobús turístico Phlash en el centro de Filadelfia. Para ver el mayor número posible de presentaciones de los guardas del zoo, consulta la programación en Internet. Para comer, es posible traerse la comida, ir a alguno de sus restaurantes o comprar comida rápida o algo más saludable en algún puesto.
El zoo abre todos los días del año, excepto los principales festivos de invierno. Los horarios de apertura varían en función de la estación.