El conjunto de bares y restaurantes convierten a la Plaza de los Héroes en la más activa de las dos plazas principales de Arras. Ambas plazas comenzaron como mercados medievales. Observa la actividad en la plaza adoquinada durante la noche, cuando los edificios de estilo flamenco se iluminan con luz dorada.
Contempla las majestuosas estructuras y los arcos, los soportales y los detalles barrocos que rodean esta plaza. La mayoría de estos edificios se destruyeron durante la Primera Guerra Mundial y se han reconstruido con un diseño similar al original. Observa los adornos pintorescos de las fachadas, como las esculturas de sirenas. Con el paso de los años, la plaza ha mantenido su aspecto encantador, a pesar de que los edificios han cambiado de propietarios varias veces y se han utilizado para diferentes cosas.
Sube a la cima del campanario para disfrutar de las vistas de los puestos del mercado que decoran la plaza. Haz fotos de la plaza y sus fascinantes edificios, con el horizonte de Arras al fondo. Las estructuras flamencas tienen estilo barroco y se construyeron originalmente en madera en los siglos XVII y XVIII.
Relájate en una cafetería por la tarde y quédate hasta la noche para ver a los artistas callejeros entrando en acción en la plaza. Degusta unos cócteles o una copa de vino en uno de los bares locales y disfruta del ambiente animado de esta plaza histórica. Pasea por el mercado que se instala en la plaza los miércoles y los sábados.
Camina por los pasajes subterráneos que conectan esta plaza con su contraparte, la Gran Plaza. Esta red de túneles, que se construyó en el siglo X y después se utilizó como refugio y centro de atención médica durante la Primera Guerra Mundial, lleva varias décadas abierta al público.
Originalmente, la plaza se llamaba Petite Place (Plaza Pequeña) y se le cambió el nombre en 1945, en honor a los miembros de la Resistencia Francesa que perdieron la vida durante la Segunda Guerra Mundial.
La Plaza de los Héroes está a 5 minutos a pie al sudoeste de la Gran Plaza, en el centro de Arras. Sigue los pasajes secretos subterráneos que conectan las dos plazas o viaja en autobús desde cualquier otro punto de la ciudad para llegar a la plaza.