La plaza del palacio, o Place du Palais, presume de ser el corazón del casco antiguo de Mónaco y, con ello, el centro de la vida monegasca. Acércate aquí para contemplar el Palacio del Príncipe, una residencia real que presenta una hermosa fachada en la que destaca la ecléctica fusión de estilos arquitectónicos. Detrás de esa mansión, observarás a lo lejos las montañas del sur de Francia. Además, desde cada extremo de la plaza, te fascinarán las hermosas vistas al puerto.
Como centro histórico de la ciudad, la plaza es uno de los principales puntos de partida para aquellos que se animan a explorar los atractivos turísticos de Mónaco. Acércate a la plaza desde abajo y lo primero que llamará tu atención será la estatua de François Grimaldi. Observa la interpretación en bronce que representa al líder de la nación vestido de monje franciscano. Y es que Grimaldi se vistió de monje para poder acceder a la preciada Roca de Mónaco en el siglo XIII. Cruza hacia el lado occidental de la plaza y observa cómo los cañones trazan los muros y evocan la época en la que el palacio era una fortaleza.
Aprovecha que te encuentras en la plaza para presenciar el cambio de guardia que tiene lugar todos los días al mediodía. Los carabineros, vestidos con un veraniego uniforme blanco o con un invernal uniforme negro, realizan meticulosamente los pasos militares de rutina, que continúan intactos desde hace cien años.
Acércate a los Grandes Apartamentos y siéntete miembro de la realeza por un día mientras paseas por sus pasillos y contemplas sus habitaciones. De hecho, podrás acceder a más de una docena de los Grandes Apartamentos, pues se encuentran abiertos al público. Descubre qué función tiene cada una de sus cámaras, como la Sala azul, donde se acogen las recepciones oficiales y cuya decoración presume de pinturas de diferentes generaciones de la familia Grimaldi. En verano, acércate a los jardines del palacio, pues ahí se celebran varios conciertos.
La plaza también mira hacia el edificio oficial de la Guardia del Príncipe. Recorre las estrechas callejuelas que te dirigirán hacia la parte trasera de este edificio, pues también te permitirán explorar el casco antiguo de la ciudad, donde te encontrarás la catedral de San Nicolás y el Museo Oceanográfico.
La plaza del palacio se encuentra en lo alto de un afloramiento rocoso en Mónaco, por lo que es posible que tengas que subir un poco para acceder a ella. Camina por la Rampe de la Major o súbete al autobús público. Desde la estación, tardarás cerca de 15 minutos a pie.