Con palacios acuáticos, templos, mercados y museos, la tranquila capital de Lombok tiene muchísimas recompensas para aquellos viajeros que decidan quedarse.
Rodeado por playas perfectas, aguas cristalinas y arrecifes de coral, este archipiélago formado por tres pequeñas islas al noroeste de Lombok se ha convertido en la definición por antonomasia de la escapada vacacional.