La preciosa capital de Austria ofrece teatros de música clásica, palacios y cafeterías de época, un zoológico histórico y galerías y discotecas modernas.
Entre los principales atractivos de este pequeño pueblo del distrito del lago de Austria se incluyen una mina de sal de 4.000 años de antigüedad y la histórica plaza del pueblo.
Visita los espléndidos campos nevados y los espectaculares jardines de este pintoresco pueblo, situado entre dos majestuosas montañas del Tirol. Regresarás con las pilas bien cargadas.
Este palacio con decoración gótica perteneció a la familia de los Habsburgo durante más de 450 años y aún es uno de los tres edificios más importantes de Austria.
En el corazón del valle Brixental descubrirás la hospitalidad tirolesa, disfrutarás de excepcionales pistas de esquí y podrás contemplar serenas vistas de la montaña.
La capital tirolesa es famosa por su encanto histórico conseguido gracias a sus edificios antiguos y a sus calles estrechas y empedradas, además de por su proximidad a estaciones de esquí de primera categoría.
Esta aldea es la puerta de entrada a los Montes del Káisery entre sus abundantes encantos destacan su riqueza alpina, sus senderos al aire libre y muchísimo sol.
Explora los caminos para practicar senderismo o ciclismo con vistas impresionantes a lo largo del Danubio y cata algunos de los mejores vinos de Austria, en esta pintoresca región vinícola, hogar de la riesling.
La capital tirolesa es famosa por su encanto histórico conseguido gracias a sus edificios antiguos y a sus calles estrechas y empedradas, además de por su proximidad a estaciones de esquí de primera categoría.
Los viajes a Viena permiten contemplar una de las iglesias barrocas más ornamentadas de la ciudad en una pequeña plaza que acoge lugares de culto desde el siglo IV.
La capital tirolesa es famosa por su encanto histórico conseguido gracias a sus edificios antiguos y a sus calles estrechas y empedradas, además de por su proximidad a estaciones de esquí de primera categoría.
Esta aldea es la puerta de entrada a los Montes del Káisery entre sus abundantes encantos destacan su riqueza alpina, sus senderos al aire libre y muchísimo sol.
Deslízate sobre la nieve fresca y perfecta de las pistas de esquí mejor valoradas de Austria y únete a las celebraciones de après-ski en este destino alpino, muy popular entre las casas reales y las celebridades.
Admira la arquitectura del Imperio austrohúngaro, esquía en los Alpes, descubre los pueblos de Bregenzerwald y disfruta del torbellino de arte de Viena y de su cultura musical.
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La capital tirolesa es famosa por su encanto histórico conseguido gracias a sus edificios antiguos y a sus calles estrechas y empedradas, además de por su proximidad a estaciones de esquí de primera categoría.