Construido sin clavos y sobre postes, este templo es parte de un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad, y ofrece belleza e historia a sus visitantes.
Este refugio de espiritualidad zen es visita obligada en los viajes a Kioto en otoño por un espectáculo sin rival: el cambio de hoja de los árboles que rodean el templo.
Observa al personal del parque dar de comer a unos 130 macacos japoneses salvajes en el monte Arashiyama o entra en una de las jaulas para hacerlo tú mismo.
Observa al personal del parque dar de comer a unos 130 macacos japoneses salvajes en el monte Arashiyama o entra en una de las jaulas para hacerlo tú mismo.
En este templo enclavado en una colina encontrarás una estatua con una historia fascinante, pasarelas de madera comunicadas, y baños públicos y de vapor.
Observa al personal del parque dar de comer a unos 130 macacos japoneses salvajes en el monte Arashiyama o entra en una de las jaulas para hacerlo tú mismo.
Este santuario a los pies del monte Inari dedicado a la diosa del arroz y la prosperidad cuenta con una bella red de caminos que pasan por miles de puertas rojas.
Aprovecha las ofertas de viajes a Kioto para visitar un santuario de gran relevancia para los habitantes más patriotas y también para los turistas ávidos de curiosidad, un lugar con edificios llenos de encanto y jardines naturales que conmemora la unión del pasado y el presente de la ciudad.
Construido sin clavos y sobre postes, este templo es parte de un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad, y ofrece belleza e historia a sus visitantes.
Aprovecha las ofertas de viajes a Kioto para disfrutar del arte, los jardines ornamentados y la gigantesca puerta de uno de los templos más importantes de su clase en todo Japón.
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Una viuda construyó este templo en 1606 en memoria de su marido guerrero. En la actualidad, se conserva como un lugar de gran belleza y tranquilidad con jardines de postal.
Este refugio de espiritualidad zen es visita obligada en los viajes a Kioto en otoño por un espectáculo sin rival: el cambio de hoja de los árboles que rodean el templo.