Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Este es uno de los viajes más asombrosos e inspiradores que se pueden hacer en Norteamérica. Montañas con picos nevados, cataratas y glaciares son solo algunas de las maravillas que podrás ver por el camino.
Una vez núcleo de la floreciente industria naval de Montreal, esta zona histórica y recreativa atrae ahora millones de visitantes a las orillas del río San Lorenzo.
Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Disfruta de unas de las mejores vistas de la ciudad y en invierno de un enorme tobogán de hielo en este paseo que discurre en lo alto sobre el río San Lorenzo.
Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Entre 1847 y 1963, esta atracción turística de Montreal fue el mercado agrícola central de la ciudad. Hoy en día es un centro comercial exclusivo con las mejores creaciones del Quebec.
Esta bella maravilla de la ingeniería se llena de barcas de recreo en verano y en invierno se transforma en la mayor pista natural de patinaje sobre hielo del mundo.
Acércate a este puerto para contemplar sus coloridas casas flotantes, embarcarte en una excursión en kayak o en un barco para ver la fauna y degustar marisco fresco.
Desciende por las pistas de esquí, da una vuelta en un trineo de carreras, disfruta de un partido de hockey de hielo o diviértete practicando ciclismo de montaña por los senderos de este parque, que se inauguró en 1988 para las olimpiadas de invierno.
Podrás observar animales exóticos e incluso dinosaurios mientras paseas por jardines botánicos y réplicas de distintos hábitats que te llevarán desde África hasta Sudamérica en pocos pasos.