Situada en la Columbia Británica, Vancouver es una ciudad norteamericana que ofrece algo distinto: es ideal para quienes disfrutan probando un poco de todo.
Este lago depende para llenarse del agua glaciar derretida y cambia de forma drástica con cada estación. La desaparición de su agua ha fascinado a la gente durante miles de años.
Situado en una bahía de la costa oeste de la isla de Vancouver, en esta ciudad turística podrás realizar excursiones por el bosque, surfear en las playas y apuntarte a viajes para avistar ballenas.
Sube en el ascensor hasta los miradores de esta emblemática torre de Toronto para disfrutar de vistas como las de las cataratas del Niágara o cenar por todo lo alto.
Playas de arena blanca, aguas cristalinas, senderos por parques provinciales e impresionantes vistas al Atlántico hacen de esta playa un paraíso para los excursionistas.
Este distrito histórico de Edmonton es un fantástico lugar para ir de compras y echar un vistazo a los mercados, para después disfrutar del teatro o de un espectáculo musical y tomar algo en una extravagante cafetería.
Descubre los caminos del bosque, las vistas al puerto, el patrimonio de guerra y a Shakespeare en este parque de la península que une el bosque con el océano Atlántico.
Los viajes a Vancouver en verano permiten nadar o tomar el sol en una de sus playas más apartadas y pintorescas, un rincón que, en el pasado, fue un campamento maderero.
Playas de arena blanca, aguas cristalinas, senderos por parques provinciales e impresionantes vistas al Atlántico hacen de esta playa un paraíso para los excursionistas.
A esta tranquila zona puede llegarse caminando desde Jasper. Aquí se ofrece alojamiento apartado para los que quieran estar en el corazón de la belleza natural de Alberta.
La vista de este lago turquesa en el Valle de los Diez Picos ha sido inmortalizada en incontables postales y en el dorso de billetes de 20 dólares canadienses.