Las cataratas del Niágara son una atracción tan inmensa que, literalmente, se encuentran a caballo entre dos países: cruzan la frontera entre el estado de Nueva York y la provincia canadiense de Ontario.
St. Thomas, o la \"capital de los trenes de Canadá\" alberga también interesantes museos, cervecerías, viñedos; así como una estatua de tamaño real de Jumbo, el famoso elefante de circo.
Este lago depende para llenarse del agua glaciar derretida y cambia de forma drástica con cada estación. La desaparición de su agua ha fascinado a la gente durante miles de años.
Podrás observar animales exóticos e incluso dinosaurios mientras paseas por jardines botánicos y réplicas de distintos hábitats que te llevarán desde África hasta Sudamérica en pocos pasos.
Desciende por las pistas de esquí, da una vuelta en un trineo de carreras, disfruta de un partido de hockey de hielo o diviértete practicando ciclismo de montaña por los senderos de este parque, que se inauguró en 1988 para las olimpiadas de invierno.