Siente la energía de una de las ciudades más grandes del planeta, hogar de tiendas de electrónica e inmensos rascacielos, arte antiguo y bellas flores de cerezo.
Asahikawa es el corazón japonés del sake, el pescado y el ramen. Sin embargo, también podrás disfrutar de un zoológico, un museo de esculturas, una aldea de cerámica, bonitos jardines e incluso pistas de esquí.
Una de las visitas obligadas en los viajes a Tokio es uno de los símbolos de su modernidad: una intersección repleta de gente que supone un auténtico festival para los sentidos.