La caída de agua de estas cataratas constituye un auténtico espectáculo para todo aquel que tiene la suerte de contemplarlas, ya sea desde un barco, un puente o la orilla del río.
Si te gusta la naturaleza, te encantará este paraíso creado por el hombre. Aquí encontrarás zonas tan distintas como un tranquilo jardín japonés zen o el colorido jardín indio Char Bagh.
En esta ciudad rodeada por puertos y selvas vivirás abundantes experiencias naturales. Pasea de isla en isla, sal a cenar junto al mar o mira el cráter de un volcán.