A pocos pasos de la ajetreada plaza del mercado podrás adentrarte en una comunidad tranquila con siglos de antigüedad, habitada por monjas que cantan con voces de ángeles.
Aprende historia y cultura de Amberes en este museo de diseño espectacular, que se yergue junto al paseo marítimo y ofrece una vista de 360 grados sobre la ciudad.
Busca entre las ofertas de viajes baratos a Durbuy y visita una ciudad valona que parece sacada de un cuento de hadas gracias a un castillo, callejuelas mágicas y una naturaleza extraordinaria. Ven a descubrir este bello rincón de Bélgica.
En las colinas repletas de bosques del sureste de Bélgica se esconden pueblecillos y castillos históricos, en un entorno ideal para montar a caballo, esquiar, caminar o pescar.
En las colinas repletas de bosques del sureste de Bélgica se esconden pueblecillos y castillos históricos, en un entorno ideal para montar a caballo, esquiar, caminar o pescar.
¿Qué lugar mejor para disfrutar de la comida y el arte que las ciudades medievales? Visita las cervecerías alojadas en antiguos monasterios y recorre los palacios reales de siglos pasados.
El \"lago del amor\" es un lugar espectacular donde dar un paseo o hacer un picnic: perfecto para descansar del ajetreo de las calles del centro histórico de Brujas.
Contempla el interior del palacio o admira la fachada de este precioso edificio desde el Parque de Bruselas. Quizá incluso puedas ver a los reyes de los belgas.
En las colinas repletas de bosques del sureste de Bélgica se esconden pueblecillos y castillos históricos, en un entorno ideal para montar a caballo, esquiar, caminar o pescar.
Con su bonita arquitectura medieval, sus agradables canales y delicias como el exquisito chocolate y la cerveza, no es de extrañar que más de 2 millones de turistas se acerquen a esta ciudad belga cada año.
¿Qué lugar mejor para disfrutar de la comida y el arte que las ciudades medievales? Visita las cervecerías alojadas en antiguos monasterios y recorre los palacios reales de siglos pasados.
En las colinas repletas de bosques del sureste de Bélgica se esconden pueblecillos y castillos históricos, en un entorno ideal para montar a caballo, esquiar, caminar o pescar.