La capital de Escocia está repleta de lugares de interés, parques y jardines, además de ofrecer festivales culturales que atraen a millones de visitantes cada año.
Descubre la rica y variada historia de esta fortaleza del siglo XIII, hoy en ruinas. En este lugar se desarrollaron heroicas batallas, fue residencia real y alojó en su interior a prisioneros políticos.
Una de las visitas más recomendables en los viajes a Bath es esta casa de campo georgiana convertida en museo y decorada para preservar el estilo de hace más de 200 años, un lugar que permite conocer la vida y los intereses de las familias de la época.
Cada uno de los asentamientos de esta región tiene alma propia, además de impresionantes paisajes que abarcan desde playas de arena hasta montañas escarpadas.