Unas vacaciones en la región de Ríos del Norte permiten recorrer el interior de la zona septentrional del estado, llena de selvas y bellos pueblos en la campiña.
Los paisajes oníricos, los fósiles de dinosaurios y las ciudades mineras históricas hacen de este valle un paraíso para paleontólogos, geólogos y cineastas.
El interior dorado y azul del corazón espiritual de Montreal fascina tanto a visitantes como a peregrinos. Antiguamente era el lugar de culto más grande de toda Norteamérica.
En Amberes conviven historia y modernidad; la capital del diamante ofrece al visitante arquitectura del siglo XVI y una floreciente escena artística de vanguardia.
Disfruta de una gran variedad de actividades al aire libre durante el verano y el invierno, y visita las capillas antiguas de este hermoso valle suizo en tus vacaciones en Funes.
Ven a admirar cómo la península mediterránea despliega sus innumerables encantos, desde las obras de Miguel Ángel o Leonardo da Vinci hasta la cuna del catolicismo o la torre de Pisa.
Gracias a su arquitectura clásica, su rica historia, sus cuevas subterráneas y sus tradicionales pizzas, esta ciudad italiana se convierte en un destino fascinante.
A esta montaña, que se eleva desde el mismo centro de la ciudad, se la conoce sobre todo por albergar la icónica estatua de Jesús, tan alta como un rascacielos.
La capital de Escocia está repleta de lugares de interés, parques y jardines, además de ofrecer festivales culturales que atraen a millones de visitantes cada año.
Esta preciosa ciudad al sur de Italia situada frente al mar es conocida por sus antiguos edificios romanos, sus preciosos paisajes y un ritmo de vida relajado.
Desde los picos de los Pirineos hasta playas bañadas de sol y regiones desérticas, España es un país que se caracteriza por ofrecer paisajes muy diversos. Disfruta de todos ellos y aprovecha para conocer su ecléctica arquitectura, probar la gastronomía de las distintas regiones y mezclarte con su gente en uno de sus numerosos festivales.
En Amberes conviven historia y modernidad; la capital del diamante ofrece al visitante arquitectura del siglo XVI y una floreciente escena artística de vanguardia.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.
Un imponente monumento situado en el centro de una rotonda con mucha afluencia de vehículos; el arco se alza majestuosamente sobre la ciudad y ofrece una panorámica inigualable.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.
El sur de Nápoles es una zona increíblemente bella y su impresionante ruta costera se abre camino entre limoneros, viñedos y pueblos en lo alto del acantilado.