Tahití, la principal isla de la Polinesia Francesa, es famosa por su deslumbrante belleza, sus montañas, selvas y arrecifes, y por su cultura animada y elegante.
La playa más famosa de Río de Janeiro es más que una extensión de arena, es el sitio donde los lugareños y los visitantes de todo el mundo van a relajarse, dejarse ver y pasarlo bien.
La vista de este lago turquesa en el Valle de los Diez Picos ha sido inmortalizada en incontables postales y en el dorso de billetes de 20 dólares canadienses.
El sur de Nápoles es una zona increíblemente bella y su impresionante ruta costera se abre camino entre limoneros, viñedos y pueblos en lo alto del acantilado.
A esta montaña, que se eleva desde el mismo centro de la ciudad, se la conoce sobre todo por albergar la icónica estatua de Jesús, tan alta como un rascacielos.
El interior dorado y azul del corazón espiritual de Montreal fascina tanto a visitantes como a peregrinos. Antiguamente era el lugar de culto más grande de toda Norteamérica.
Disfruta de una gran variedad de actividades al aire libre durante el verano y el invierno, y visita las capillas antiguas de este hermoso valle suizo en tus vacaciones en Funes.
Tahití, la principal isla de la Polinesia Francesa, es famosa por su deslumbrante belleza, sus montañas, selvas y arrecifes, y por su cultura animada y elegante.
La capital de Escocia está repleta de lugares de interés, parques y jardines, además de ofrecer festivales culturales que atraen a millones de visitantes cada año.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.
Tahití, la principal isla de la Polinesia Francesa, es famosa por su deslumbrante belleza, sus montañas, selvas y arrecifes, y por su cultura animada y elegante.
Aprovecha tu visita a Brasilia para contemplar la extraordinaria e innovadora arquitectura de este bello edificio y, después, disfruta de exposiciones de arte, películas y obras de teatro.