By Expedia Team, on October 25, 2019

Los 100 lugares imprescindibles para unas vacaciones en Francia

“Desde las costas del Canal de la Mancha al Mediterráneo, pasando por el Macizo Central, del océano Atlántico a los Alpes desviándose por París, Francia cautiva por la diversidad de sus paisajes y su patrimonio. Y no nos olvidemos de islas famosas por su belleza salvaje, como Córcega, o destinos más exóticos, como los territorios de ultramar. Una belleza diversa acompañada de la riqueza de estas tierras y sus tradiciones.

A lo largo de tus peregrinaciones, te impregnarás de una historia centenaria, incluso milenaria, de los lugares que visites; sucumbirás a la tentación de sus platos típicos, muchos de los cuales han contribuido al reconocimiento mundial de la cocina francesa, y te maravillarás ante la habilidad ancestral de los artesanos franceses. Independientemente de que seas ratón de campo o urbanita, apasionado de la cultura o aficionado al deporte, los acantilados vertiginosos tallados por el viento, los imponentes macizos montañosos, los cursos de agua, los preciosos pueblos que nacieron a sus orillas, las playas salvajes o paradisíacas, los densos bosques y las reservas naturales que te encontrarás en tu camino por Francia, colmarán tus expectativas. Aquí te presentamos los 100 lugares que nos han enamorado, meticulosamente ordenados por comarca. Esta lista te ayudará a hacerte una idea más precisa del rumbo que tomarás en tu próxima escapada. Después solo te quedará elegir un hotel en Francia, reservar tu vuelo al destino o al interior de Francia y, finalmente, contratar un coche de alquiler para surcar los caminos franceses. Así lo tendrás todo para que no te quede nada por ver de la magnífica región donde hayas puesto el objetivo.

### 1- Descubre el París que más te guste

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Romántico, poco convencional, clásico, cultural, comercial, gastronómico… París se mostrará ante ti como tú lo entiendas. ¿Dónde te gustaría pasar el rato? ¿En los muelles del Sena? ¿En Montmartre? ¿Contemplarás los tejados de París desde la torre Eiffel o el Arco del Triunfo? ¿Prefieres, en lugar de eso, visitar el Louvre o el Museo Grévin? A la hora de relajarte, ¿prefieres las tiendas de los Campos Elíseos o la singularidad de Saint-Germain-des-Prés? ¡La decisión es tuya!

### 2- Disfruta viendo brillar los ojos de tus hijos en Disneyland Paris

Sucumbe a la magia de este fabuloso parque de atracciones donde todo es fantasía. Tus cachorros se sumergirán felices en el universo cautivador de sus dibujos favoritos y se pondrán como locos al cruzarse con sus héroes por las calles del parque. En cuanto a ti, no te aburrirás en las montañas rusas o durante el magnífico espectáculo de luz y sonido con el que acaba la jornada.

### 3- Descubre la vida de palacio en Versailles

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Los jardines franceses de Versailles, con sus diseños geométricos y sus juegos de fuentes sabiamente orquestados, tienen un no sé qué que hace palidecer de envidia a los más importantes jardines de todo el mundo. Son el marco perfecto para un castillo que lo tiene todo. En este sublime edificio construido por Luis XIV, que alberga 2300 habitaciones, marcharás al paso del rey de Francia.

### 4- Te quedarás pasmado ante los impresionantes acantilados de Étretat

Manneporte, Courtine, la roca Vaudieu, los acantilados de Aval y Amont… un halo de misterio se cierne sobre Étretat y te embriaga. Te atrae mar adentro para apreciar las singulares formas talladas por el viento y las olas, o te invita a tomar altura, hasta dominar este fantástico teatro a cielo abierto en el canal de la Mancha.

### 5- Asiste a un fabuloso espectáculo frente a la catedral de Rouen

La catedral de Nuestra Señora de Rouen es el monumento más importante de la ciudad y el máximo exponente del arte gótico, además de una joya de la historia normanda. Este edificio en perpetua evolución ha hecho frente a invasiones vikingas y ha resistido a los bombardeos de los aliados de 1944 para elevar orgullosamente hacia el cielo la aguja más alta de Francia. En verano, la ciudad comparte algunos de sus secretos mejor guardados a través de un increíble espectáculo de luz y sonido.

### 6- Sigue las huellas de pintores impresionistas en la Costa Florida

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La Costa Florida fue una auténtica fuente de inspiración para Monet y sus amigos. Y uno de sus puertos más bonitos es el de Honfleur. Deliciosamente típico, con sus casitas estrechas, pegadas unas a otras para resistir mejor los envites del mar. Sigue la ruta hasta Trouville, Deauville o, incluso, Cabourg, y por el camino encontrarás los paisajes que han inspirado las más bellas escenas marítimas impresionistas.

### 7- Rememora hechos históricos en las playas del Desembarco

Utah, Omaha, Gold, Juno y Sword son nombres, como poco, extraños para las playas de Calvados. Así fueron rebautizadas las cinco playas normandas en las que desembarcaron las fuerzas aliadas. Tanto en la Costa de Nácar como en el interior, los cementerios militares, los museos y otras necrópolis mantienen vivo el recuerdo de la mayor operación militar de todos los tiempos.

### 8- Haz a pie la travesía hasta el Mont-Saint-Michel

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Métete en la piel de los peregrinos y desafía al mar y el terreno inestable de la arena al bajar la marea para alcanzar un lugar espiritual como es la abadía de Mont-Saint-Michel. Una experiencia inolvidable que debes vivir en compañía de un guía, porque la bahía puede resultar peligrosa a quien se aventure a ir solo. Lo mejor es que este descubrimiento insólito se puede disfrutar innumerables veces, puesto que el espectáculo que ofrece este ecosistema único es distinto cada día y cada estación.

### 9- Visita la catedral más grande de Francia y los hortillonnages en Amiens

La catedral de Nuestra Señora de Amiens, declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO, es la más grande de Francia, razón suficiente para visitar esta ciudad de encantadoras callejuelas bordeadas de bonitas casas que albergan cafeterías y restaurantes. Amiens también tiene otros atractivos, en particular, los hortillonnages que podrás explorar en barco o, sencillamente, a pie.

### 10- Vive al ritmo de las mareas en Bahía de Somme

¿Qué te parecería una estancia yodada, en contacto con la naturaleza? Aquí tienes paisajes en cinemascope, paseos en un pequeño tren por la bahía y platos exquisitos como los de salicornia y oreja de cerdo. En este ecosistema fuera de lo común, observarás entre otras cosas las focas en su medio natural o te aficionarás a la ornitología durante un paseo por el parque del Marquenterre.

### 11- Sal de las rutas convencionales: atrévete con el norte

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Lille, Grand-Place

Cierto es que el Norte es menos codiciado que sus antípodas, más soleadas, pero tiene muchos ases escondidos en la manga. Está, por supuesto, el casco antiguo de Lille, con sus callejuelas ribeteadas de hoteles particulares y su ambiente, tan particular. Y, sí, ya que estamos, déjate llevar por un viento de locura con acento local. Del Museo de la Piscina de Roubaix a la extraña cúpula de San Omar, pasando por la escalera de caracol del faro de Touquet, el Norte te dejará un recuerdo imborrable.

### 12- Enamórate de la arquitectura en Arras

Si te interesan los edificios extraordinarios, te encantará deambular por Arras, una ciudad que muchos llaman la “perla del gótico en un estuche barroco”. Comienza tu paseo por la Grand-Place, donde se alinean magníficas residencias de arquitectura flamenca, formando un marco de honor para el ayuntamiento. Sube hasta lo alto de la torre de este último para descubrir las iglesias, hoteles particulares y otras construcciones art decó que vas a visitar.

### 13- Practica deportes acuáticos y senderismo en la Costa de Ópalo

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Berck-Plage

Es la perfecta encarnación de la belleza salvaje. La Costa de Ópalo es un lugar idílico en el que tomar un buen soplo de brisa marina. Pasea por las dunas. Sube a los acantilados y contempla el mar hasta donde se pierde la vista. Después, relájate en Berck, en Touquet o en Calais, la ciudad de los encajes y la moda. En el mar, el viento hará las delicias de los amantes de la vela; mientras que los aficionados a la gastronomía se interesarán más por la pesca y sus productos.

### 14- Déjate embriagar por el viento en la zona de los dos cabos

Las rachas de viento que barren los cabos Gris-Nez y Blanc-Nez (literalmente, nariz gris y nariz blanca) amenizarán con toda seguridad tus salidas al aire libre. Observarás las gaviotas y las gavinas jugueteando al capricho del viento e invitando a los adeptos a la vela a hacer lo mismo en las preciosas playas que se ven más abajo. ¿Te animas a llevar una cometa y probar unas acrobacias? Puede ser divertido.

### 15- Saca tu alma de corsario en Saint-Malo

Regálate una inmersión en el apasionante universo de los marineros, los descubridores y los pescadores poniendo rumbo a esta bonita ciudad portuaria de la Costa Esmeralda. Detrás de las murallas, por entre el laberinto de las callejuelas del centro histórico, descubrirás los tesoros de Saint-Malo: antiguas jarcias, termas marinas, crêpes de harina sarracena, la tumba de Chateaubriand… ¡Aquí te espera un delicioso concentrado de toda la Bretaña!

### 16- Disfruta de otra forma la cultura en Rennes

Rennes, toda una experta en el arte de revisitar su patrimonio histórico a través de la cultura urbana, nos invita a multiplicar las experiencias originales. Ofrece desde la ópera en la gran pantalla en Tatoo Convention al festival Stunfest… combinando casas de madera con el arte callejero. La capital histórica de la Bretaña tiene, decididamente, atractivo para todas las edades.

### 17- Compón una magnífica paleta de recuerdos en el cabo Fréhel

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_Cabo Fréhel – Créditos foto: GeorgeDement, con licencia de CC BY-SA 2.0

Desde el balcón de granito que domina el horizonte a más de 70 metros, puedes admirar el mar vestirse de verde, de azul o de gris, al antojo del sol, que juega al escondite entre las nubes. Cuando el astro brilla y emite su haz de luz, forma una gama de rosas que se reflejan en los acantilados y la landa florida de brezos.

### 18- Sucumbe al romanticismo de la Costa de Granito Rosa

Con sus rocas y acantilados labrados por la erosión, las Costas de Armor despliegan paisajes tan majestuosos como intrigantes. Al caer el día, el rosa del granito se intensifica con los tonos cálidos del sol. Ese es un momento en el que se para el reloj y es mejor aún si lo saboreas con la persona a la que amas. De Perros-Guirec a Lannion, encontrarás encantadores balnearios que te recibirán con los brazos abiertos.

### 19- Olvida el estrés en Ouessant

Nada como una isla protegida del turismo de masas para revitalizarse. En la isla de Ouessant, vivirás en comunión con la naturaleza. Calas escondidas entre los acantilados rocosos, ovejas pastando, iglesias, faros y calvarios componen la imagen típica bretona. Contemplando las aves de la reserva ornitológica y las idas y venidas de las focas en la playa, retornarás a una vida sencilla.

### 20- Enfréntate a los elementos en la punta de Raz

Desafiando las aguas tumultuosas del Atlántico, la punta de Raz es testigo de la fuerza del mar y del viento. Asómate a contemplar el Raz de Sein y a lo lejos el célebre faro Ar Men, el más alejado de las costas francesas. Eso sí, al asomarte, prepárate a recibir las salpicaduras de las olas. Una región de múltiples atractivos que descubrirás peregrinando desde la costa del Cabo Sizun, la bahía de Douarnenez o, incluso, la punta de Van…

### 21- Degusta las ostras de la preciosa región de Carnac

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Si bien Carnac es conocida mundialmente por sus cerca de 3000 menhires en pie desde la prehistoria, también se le conoce por su encantador balneario y por el arte de sus ostricultores. Por ello te invitamos a poner rumbo a Plouharnel, la Trinité-sur-Mer y Auray, y cargar de sabores marinos. Basta un trozo de pan untado de mantequilla salada y un vasito de vino blanco para tener un aperitivo insuperable.

### 22- Bucea en alta mar, en el archipiélago de Glénan

Pon las coordenadas en el GPS e inicia un viaje en el que te reencontrarás con la fauna marina de Finisterre, en las islas de Glénan. Con la cabeza debajo del agua, o fuera de ella, comprobarás rápidamente que este biotopo bien conservado, situado a pocos cables de Concarneau, no tiene nada que envidiar a sus homólogos del sur. ¡Aquí te esperan los martines pescadores, las gorgonias, las estrellas de mar y los cangrejos!

### 23- Saborea las especialidades de Belle-Île-en-Mer

Con sus paisajes auténticos y bien conservados, esta gran isla del golfo de Vizcaya, a unos cuarenta minutos en barco desde Quiberon, te deleitará en muchos sentidos. Después de contemplar, como hicieron Monet o Flaubert, la belleza de estos paisajes, mímate con una sopa de pescado, los quesos de cabra, la miel, las galletas de mantequilla y otras galletas bretonas. Un verdadero festival de sabores, a la altura de este país “superbe de sauvagerie”_, en palabras del propio Monet.### 24- Súbete a la maravillosa máquina del tiempo del Puy du Fou

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Espectáculos impresionantes, recreaciones de magníficos pueblos de época desde la antigüedad hasta el siglo XX, representaciones, cetrería… estos son solo algunos ejemplos de lo que este parque temático de fama mundial te reserva, en el corazón de un bosque centenario de la Vendée. Un fabuloso viaje a través del tiempo que apasionará a niños y mayores por igual.

### 25- Entre Nantes y Saint-Nazaire, te aguarda un asombroso recorrido artístico

Móntate en tu bici o embárcate en un crucero por el Loira hasta su desembocadura en el mar… A lo largo de 60 kilómetros, no son menos de 30 obras de arte contemporáneo nacidas del genio de artistas de altos vuelos las que jalonan el camino. Algunos ejemplos son La casa en el Loira, de Jean-Luc Courcoult, y La serpiente de mar, de Huang Yong Ping. Un museo a cielo abierto, con acentos insólitos, que imprimirá recuerdos imborrables.

### 26- Comparte momentos auténticos en Noirmoutier

La isla de Noirmoutier es un destino familiar por excelencia, muy apreciado por las playas salvajes ribeteadas por dunas. Esta isla propicia para la contemplación de la naturaleza te invita a meditar frente al mar, a admirar la coreografía de las aves en la reserva Polder de Sébastopol, y a aspirar el dulce perfume de los claveles en los alrededores del parque ostrícola de Bonhomme, con sus coloridas cabañas de pescadores.

### 27- Recorre la Venecia verde a pie o en barco

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Del litoral a las antiguas islas unidas al continente, la extensa marisma del Poitou se muestra con una exuberante paleta de verdes. En una humilde barca, te dejarás llevar por la corriente por entre las lentejas de agua, sumido en un silencio y un ambiente misterioso. De vuelta en tierra firme, la marisma te mostrará su otra cara: las zonas desecadas y las praderas de boscosas.

### 28- Vive una experiencia familiar única en Futuroscope

A poca distancia de la ciudad cultural y festiva de Poitiers, se encuentra Futuroscope. Este parque temático fuera de lo común te ofrece una aventura inolvidable para toda la familia: espectáculos de agua nocturnos, aventuras palpitantes, atracciones emocionantes… Un lugar para experimentar emociones y sensaciones, todas las generaciones juntas.

### 29- Ubica tu campamento base en La Rochelle

¿Has pensado siempre que tienes alma de marinero? ¿Qué te parecería salir al mar? ¿Te gustaría pasar una noche a bordo de un barco? ¿Harías una excursión hasta el mítico fuerte Boyard para impresionar a tus pequeños grumetes? ¿Esta escala es más bien romántica? En ese caso, elige mejor una cena en medio del mar, a bordo del Columbus, uno de los más célebres veleros de la Vendée Globe.

### 30- Sal a conocer las 10 caras de la isla de Ré

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A lo largo de la región de Aunis, los diez pueblos del tesoro de la costa atlántica te invitan a descubrir su singularidad, entre el océano, salinas, dunas y bosques. Desde el encantador puerto de La Flotte a las preciosas playas de La Couarde-sur-Mer, pasando por Saint-Clément-des-Baleines con ese aire de ser el fin del mundo, ¡la desconexión será total!

### 31- Regálate un bautismo de vuelo sobre la isla de Oléron

La isla de Oléron y la cuenca de Marennes son absolutamente magníficas… más aún, vistas desde el aire. Mientras que los más osados pueden hacer su bautismo de paracaídas, otros preferirán tomar asiento a bordo de un helicóptero o de un ultraligero. ¿Conseguirás reconocer el castillo de Oléron, el bosque de Saint-Trojan-les-Bains o el emblemático faro de Chassiron?

### 32- Mírate en el espejo de agua de Burdeos

Haz las maletas, nos vamos a Burdeos, a orillas del Garona. Comenzaremos la visita por esta creación imprescindible del paisajista Michel Corajoud. Esta gigantesca losa de granito recubierta de dos centímetros de agua se instaló hace menos de diez años en la plaza de la Bolsa y ya se ha valido el reconocimiento de Patrimonio Mundial contemporáneo. Haz un alto refrescante, romántico o sencillamente lúdico… sin olvidar de posar para la posteridad delante del reflejo de esta magnífica fachada del siglo XVII.

### 33- Sube a la duna más alta de toda Europa

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¿Tienes muchas ganas de ir al Sáhara pero este destino lejano no está a tu alcance? ¡Escápate y desconecta en la Costa de Plata! Allí es donde, al borde del macizo forestal de las Landas, te espera la famosa duna del Pilat, un fenómeno geológico extraordinario que podríamos calificar de auténtico “archivo natural”. Desde la cima de este gigantesco montón de granos de cuarzo de 106 metros de altura, podrás contemplar las magníficas vistas de la cuenca de Arcachon.

### 34- Un festín para tus papilas gustativas en Sarlat-la-Canéda

La magnífica villa de Sarlat-la-Canéda, en el departamento de Dordoña, te invita a darle una alegría a tu paladar. Si el castillo de Puymartin, situado en el municipio de al lado, bien merece una visita, no es menos el mercado de alimentos cubierto que se monta en la iglesia de Santa María. Foie gras, quesos y otras especialidades locales crearán una explosión de sabores en tu boca.

### 35- Vuelve a los orígenes en Lascaux

La cueva de Lascaux ha sido apodada “la Capilla Sixtina del arte parietal” por sus magníficos frescos prehistóricos trazados alrededor de 15 000 años a. C. Aunque se ha prohibido el paso a la cueva para preservar este fantástico tesoro heredado de nuestros ancestros cromañones, el Centro Internacional de Arte Parietal nos presenta una reproducción idéntica, en el valle de la Vézère, una de las cunas de la humanidad.

### 36- Desafía las olas en Biarritz

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Las escuelas de surf se suceden unas con otras en los alrededores de esta ciudad balneario de la costa vasca. Los spots y las olas de Biarritz son muy apreciados por surfistas de todo el mundo desde los años cincuenta, lo que ha elevado a la ciudad al rango de capital histórica de esta disciplina en Europa. La Maison du Surf, en pleno corazón de esta ciudad balneario, está consagrada a la cultura de este deporte de tabla.

### 37- Sé testigo de la trashumancia en el valle de Ossau

Un lugar realmente imprescindible de Béarn es el valle de Ossau, el lugar perfecto para asistir a la tradicional estivade. En julio, los rebaños dejan el valle para volver a los prados aromáticos de la alta montaña. Una tradición ancestral durante la cual millares de bestias animan los pueblos con el sonido de sus cencerros. La feria de quesos es en octubre, pero el fruto de la maduración a la antigua se puede saborear durante todo el año.

### 38- Los espectáculos de luz en Chartres

De la expectativa que suscita el primer Festival de la Luz nace el evento Chartres en lumières. Un festival que viste de fiesta todos los años, de abril a octubre, una veintena de espacios notables. Una cita única en el mundo que puedes disfrutar a pie, en canoa, en trenecito, participando en un juego de orientación, siguiendo un recorrido marcado o de cualquier otra forma que se te ocurra. El Festival de la Luz es el punto culminante de este evento y promete espectáculos en la calle, instalaciones plásticas y muchas animaciones interactivas. ¡Una experiencia mágica para niños y adultos!

### 39- Ábrete paso por el valle de los Reyes de Francia

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Château de Sully-sur-Loire

Los castillos del Loira han sido declarados Patrimonio Mundial de la UNESCO por el equilibrio y la simetría de su arquitectura. El castillo de Cheverny inspiró el de Moulinsart; el castillo de Villandry es tan bonito como sus jardines y en el castillo de Clos Lucé residió Leonardo da Vinci. Todos tienen una historia apasionante que contar.

### 40- Sumérgete en la Edad Media en Bourges

A la sombra de la imponente catedral de Saint-Étienne, se instala, todos los años durante el mes de junio, el corazón del pueblo de la Feria Medieval de Bourges. Allí te cruzarás con mercaderes, agricultores y tejedores, sin olvidar a los caballeros que acuden a comprar las más bellas armaduras. Vestidos al estilo medieval, tus hijos intentarán sacar a Excalibur de la roca, atrapar los bombones que se lanzan con catapultas o reconocer a personajes emblemáticos, como Jacques Cœur o Juana de Arco.

### 41- Amplía tus pasiones en Vézelay

Existen mil y un motivos para visitar Vézelay. ¿Eres aficionado a la cultura? Cruza el umbral de la basílica de Santa Magdalena, una auténtica obra maestra del arte románico. ¿Eres de los hedonistas? Degusta el delicioso vino blanco que se produce en uno de los Pueblos Más Bonitos de Francia. ¿Necesitas recargar baterías? Pasea en grupo o solo por los caminos de Vézelien, jalonados de curiosidades: talleres de alfareros, herreros, el museo de arqueología, alojamientos de agroturismo, galerías de arte…

### 42- Saborea los néctares divinos de Borgoña

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A lo largo de 87 kilómetros entre Dijon y Beaune y, de ahí, hasta Santenay, el camino de los grandes viñedos va desgranando maravillas. Por supuesto, encontrarás abadías cistercienses y otros pueblos auténticos, pero también fincas, castillos y denominaciones prestigiosas: Chambertin, Pommard, Meursault… Prolonga el placer, espacia las degustaciones y descubre pueblos que derrochan encanto, con sus lavaderos, sus hornos de pan y sus chozas de piedra.

### 43- Visita el corazón espiritual de la Europa medieval en Cluny

La abadía de Cluny, fundada en 910 por Guillermo de Aquitania, fue durante cinco siglos el edificio religioso más grande de Europa, hasta la construcción de San Pedro en Roma. En la actualidad, sus impresionantes vestigios siguen siendo muestra del poder que ostentó durante la Edad Media. ¡No te lo pierdas!

### 44- Supera tus límites en Puy-de-Dôme

Montañas, lagos volcánicos, senderos señalizados… en Puy-de-Dôme, las oportunidades de practicar actividades al aire libre se multiplican. Báñate en estanques alimentados por cascadas, rema en un entorno de ensueño, recorre grandes espacios en caballo o en bici. Globos aerostáticos, parapente y ala delta son solo algunas de las posibilidades. Libre como el aire, apreciarás al máximo los magníficos paisajes de Auvernia.

### 45- Varios días de senderismo por Cantal

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¿Qué te parecería admirar todos los días paisajes excepcionales en la cadena de los Puys, el macizo de Sancy y los montes de Cantal? Te tenemos reservados numerosos itinerarios de 79 a 135 kilómetros que puedes hacer en entre 5 y 8 días. Una experiencia fuera de lo común que, además de paisajes maravillosos, te ofrecerá la oportunidad de conocer de cerca el tiempo y la vida de la gente de las montañas del Macizo Central.

### 46- Enamórate de la flora y la cuchillería de Aubrac

Descubre Aubrac-Laguiole, una región de naturaleza y artesanos. Aquí, el amor por el trabajo bien hecho, la tradición y la buena disposición a la modernidad dan lugar a unos cuchillos de excepción, famosos en el mundo entero. Un universo totalmente apasionante que la flora local que se deshoja entre cascadas, turberas y Boraldes. La genciana, las droseras y las calaminthas son solo algunas de las 2000 especies que colorean la llanura.

### 47- Sigue tus sueños en Puy-en-Velay

¿Te apetecería llenarte de magia, regalarte un paréntesis cultural, recorrer el Camino de Santiago, probar a hacer encajes o, incluso, ir a la playa de Vivier? ¡Todo eso lo puedes hacer en Puy-en-Velay! La ciudad se localiza en las cabeceras del río Allier y del Loira salvaje, de modo que en ella se pueden practicar deportes acuáticos. Su chimenea volcánica de más de 2 millones de años te dejará con la boca abierta cuando se anime con magníficas proyecciones visuales.

### 48- Cruza los traboules para extraer todos los secretos de Lyon

Con la catedral de San Juan, la casa de Chamarier, la torre Rosa y las innumerables fuentes y estatuas empotradas en las esquinas, el casco antiguo de Lyon es un auténtico museo a cielo abierto. Olvida el coche y recorre la ciudad cruzando los traboules, esos pasajes que unen una calle con otra atravesando patios interiores y edificios. Una visita singular con la que conocer la historia de la ciudad e, incluso, el dialecto lionés.

### 49- Respira a pleno pulmón en Vercors

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Con sus senderos escarpados, junto a los acantilados, las grandes extensiones en las que historia y naturaleza se entremezclan y el laberinto de sus grutas subterráneas, el macizo de Vercors promete múltiples ocasiones de evasión. Sube a sus altas mesetas y disfruta de los esplendores de la reserva natural, donde excursionistas, marmotas y gamuzas se cruzan entre lavanda, edelweiss y orquídeas.

### 50- Haz cima en el macizo del Mont Blanc

Si hay destinos que empujan a superarse a uno mismo, el valle de Chamonix es, sin lugar a duda, uno de ellos. ¿Estás preparado para afrontar el reto de subir al techo de Europa? Si no lo estás, puedes subir en el teleférico de Aiguille du Midi, donde el famoso tren de cremallera permite admirar el mar de hielo y las cimas de Grandes Jorasses. Aquí tienes garantizadas unas magníficas vistas, seas o no deportista.

### 51- Practica deportes outdoor en Annecy

Este pueblo alpino de origen medieval, además de ser precioso para una visita, nos ofrece una naturaleza impresionante. Cálzate unas buenas botas para hacer senderismo por el cañón del río Fier o apúntate a algún deporte acuático para disfrutar del lago.

### 52- Mímate en Ardèche

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La cueva de San Marcelo, Ardèche

¿Qué te hace sentir bien? ¿Un tratamiento termal? ¿Pasear por pueblos pintorescos? ¿Pasar un día pescando en un entorno natural de extrema belleza? ¿Sobrevolar Annonay, Antraigues o Labeaume en globo aerostático? ¿Cruzar el puente del Arco en canoa? O, ¿descubrir en Soyons el núcleo rocoso que se esconde en las entrañas de la Tierra? La única dificultad en Ardèche es elegir.

### 53- Asciende al pueblo más alto de Europa

La pequeña localidad de Saint-Véran, conocida también como el “país donde los gallos picotean las estrellas”, te recibe a 2040 metros de altura, en el Parque Natural Regional de Queyras. En este pueblo, catalogado como uno de los más bellos de Francia, puedes practicar senderismo, esquí alpino y esquí de fondo. Un destino claramente de montaña que puedes disfrutar en cualquier estación.

### 54- Sucumbe a la magia de Baume-les-Messieurs

Rodeado de los grandes acantilados del Jura, encajonado al fondo de un circo, Baume-les-Messieurs te invita a descubrir su universo cautivador de cuevas, cascadas de toba y una abadía imperial. Un lugar majestuoso, sorprendente y vibrante que figura entre los pueblos más bonitos de Francia.

### 55- Haz el tour en Besançon

Anidado en un bucle del río Doubs desde tiempos inmemoriales, Besançon ha sabido cultivar su rico pasado. Comienza tu recorrido entrando en la catedral de San Juan y descubriendo el mecanismo de su célebre reloj astronómico. Sube hasta la ciudadela imaginada por Vauban y, a continuación, franquea las murallas para visitar los tres museos y el zoo de esta encantadora ciudad fortificada situada a un tiro de piedra de la frontera suiza.

### 56- Domina la llanura alsaciana desde Haut-Kœnigsbourg

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Las murallas del castillo de Haut-Kœnigsbourg se yerguen orgullosamente hasta los 757 metros. Desde lo alto, obtendrás unas excepcionales vistas panorámicas de Alsacia, los Vosgos, la Selva Negra e, incluso, pueden llegar a verse los Alpes. Cuando cruces el puente levadizo, descubrirás una colección de armas de la Edad Media, el jardín medieval, el torreón y el gran bastión. Las visitas teatralizadas, las exploraciones sensoriales y el descubrimiento de plantas comestibles animan la agenda de este importante destino del turismo en Alsacia.

### 57- Amplía tus conocimientos en Estrasburgo

Estrasburgo, que es capital de Alsacia y de Europa, cuyas instituciones alberga, es notable por su patrimonio histórico y arquitectónico. Esta ciudad, que marca la puerta norte de la ruta de los vinos de Alsacia, tiene más de un as en la manga: las fachadas entramadas típicas de la Petite France, la iglesia de San Pablo, el palacio Rohan y la catedral, entre otros. Aquí no faltan atractivos turísticos.

### 58- La vida en colores en Colmar

Con sus casas de madera pintadas de todos los colores del arco iris, en Colmar vivirás un cuento de hadas. Un cuento al que contribuyen la Pequeña Venecia y la sorprendente Casa de las Cabezas. Aquí, las tiendas compiten en encanto. Descubrirás delicias como las frutas confitadas, las galletas y un capricho ineludible, el kougelhopf. Será como volver a la infa