Bienvenido a Casablanca, una ciudad vibrante con una rica historia y lugares de interés cultural.
Tras recogerte en tu hotel o en un punto de encuentro en el centro de Marrakech, comienza tu excursión de un día a Casablanca.
La primera parada será para hacer un descanso y desayunar.
Después, te dirigirás hacia la plaza Mohamed 5. Aquí, dispondrás de unos 20 minutos para explorar la zona, apreciar su importancia histórica y hacer fotos. Lo siguiente en el itinerario es el punto culminante de tu viaje, la renombrada Mezquita Hassan 2, que no es sólo un lugar religioso, sino también una obra maestra arquitectónica que simboliza la modernidad y grandeza de Marruecos. La mezquita, que lleva el nombre del rey Hassan II, es un testimonio del rico patrimonio cultural y de las tradiciones islámicas del país.
(tasa de 14€ PP).
Antes de ir a almorzar, dispondrás de tiempo libre cerca de la Corniche para disfrutar de las impresionantes vistas de la costa y del vibrante ambiente. Este pintoresco paseo marítimo se extiende a lo largo del océano Atlántico y está repleto de cafés, restaurantes y animados lugares de playa. Pasea tranquilamente por el paseo marítimo, relájate en las playas de arena o tómate una bebida refrescante mientras contemplas la puesta de sol sobre el océano. La Corniche es el lugar perfecto para relajarte y empaparte de la belleza de la costa de Casablanca antes de concluir el día.
Tendrás un merecido almuerzo para saborear la deliciosa cocina marroquí, sumergiéndote en los sabores de la cultura local. Después, disfruta de un rato de relax en una de las impresionantes playas de Casablanca como último punto antes de abandonar esta histórica ciudad.
El punto interesado y siguiente es Habous, también conocido como la Nueva Medina, es un encantador barrio de Casablanca que mezcla maravillosamente la arquitectura tradicional marroquí con influencias modernas. Fundada a principios del siglo XX, cuenta con calles estrechas repletas de tiendas de artesanía, cafés y mercados locales. Los visitantes pueden explorar vibrantes zocos que ofrecen artesanía, especias y tejidos, mientras que la impresionante arquitectura muestra un intrincado trabajo de azulejos y elegantes arcos. La zona es un apacible refugio de la bulliciosa ciudad, que ofrece una visión de la cultura y el patrimonio marroquíes.
Al final del día, emprenderás el viaje de regreso a Marrakech, atesorando los recuerdos de un día inolvidable lleno de exploración, inmersión cultural y el encanto único de Casablanca.