En esta excursión de día completo, explora el esplendor de un valle montañoso, una isla y la costa. Este viaje tiene algo para todos los gustos, desde las amplias vistas del valle hasta la salvaje costa y las magníficas montañas. Así que alza el vuelo, extiende tus alas y deja volar tu imaginación. Amplía, relaja, regenera y resetea.
Todo el mundo necesita espacios para jugar y rezar, donde la naturaleza pueda curar y dar fuerza al cuerpo y al alma, así como belleza.
Haremos una parada para tomar un desayuno ligero de camino al valle de Skagit. Haz una rápida excursión hacia el sur, a la ciudad de Mount Vernon. La histórica comunidad se asienta en la confluencia de varios ríos y pantanos, una atracción irresistible para una gran variedad de especies de aves: ¡ten a mano los prismáticos! El paseo fluvial y el centro adyacente son ideales para explorarlos a pie y figuran en el Registro Nacional de Lugares Históricos. En Mount Vernon también se celebra el Festival del Tulipán del Valle de Skagit, que atrae a visitantes de todo el mundo cada primavera. Sigue conduciendo hacia el valle del río Skagit, donde los campos están salpicados de pintorescas granjas y una plétora de graneros históricos. El valle de Skagit alberga la mayor industria comercial de bulbos de flor fuera de Holanda. A partir de marzo y hasta mayo, todo el valle se convierte en una inmensa alfombra de flores, con las espectaculares vistas del monte Baker, de 3.000 metros de altura, y las Cascadas del Norte como telón de fondo.