Camina tras los pasos de la gran reina Tudor e imagina la opulencia y el esplendor del Kenilworth isabelino. Recorre los senderos para descubrir la fuente de mármol, la pajarera ornamentada y el emblema del conde de Leicester del oso y el bastón de trapo. Elige entre un billete sencillo o familiar.

Visita la fascinante exposición sobre el famoso romance real entre la reina y su ambicioso cortesano, Robert Dudley. Explora el dormitorio isabelino y la Sala del Roble, que contiene una chimenea de alabastro bellamente ornamentada que en su día estuvo en las habitaciones privadas de Isabel I.

Diviértete con las exposiciones interactivas para toda la familia que dan vida al pasado de Kenilworth. Alojado en los magníficos establos Tudor, observa cómo ha cambiado el castillo a lo largo de sus 900 años de historia. Los niños pueden acercarse a la historia probándose ropa de disfraz y viendo y tocando las poderosas bolas de trebuchet que se lanzaron contra el castillo de Kenilworth hace 800 años.

Admira la poderosa Torre del Homenaje, el corazón de la vida del castillo durante 500 años. Relájate con una visita al Stables Tearoom, que ofrece una deliciosa selección de pasteles y almuerzos ligeros, elaborados con ingredientes de temporada y procedentes de proveedores locales.