Pasa el día en el corazón de Suiza, entre las dramáticas cumbres de Engelberg, una renombrada estación de verano e invierno. También puedes saborear la cultura regional en la pintoresca ciudad de Lucerna, con sus impresionantes vistas alpinas y el resplandeciente y sereno lago de Lucerna a su lado.
Empiezas tu viaje en Zúrich y te diriges a una de las mejores zonas de esquí del mundo, en la tranquila localidad de Engelberg. Una vez que te dejen, el itinerario del día depende de ti. Observa uno de los mayores descensos verticales del mundo: 2.000 m (6.500 pies) desde la cima de los remontes del monte Titlis hasta la ciudad. Sus teleféricos también funcionan en verano, cuando puedes subir a practicar senderismo y ciclismo.
No dejes de visitar el monasterio benedictino de estilo barroco que domina el centro de la ciudad. Aquí se encuentra el órgano de tubos más grande del país, que destaca grandiosamente en su espectacular interior. Termina tu estancia en Engelberg paseando entre hoteles de la Belle Époque y antiguas capillas, con tiempo suficiente para probar el plato local favorito: macarrones suizos con queso (Aelplermakkaroni)
Tu siguiente parada, Lucerna, es típica de las ciudades suizas, asentada encantadoramente sobre el cobalto del lago de los Cuatro Cantones, en medio de las montañas nevadas. Pasea por el Puente de la Capilla, uno de los puentes de madera cubiertos más antiguos de Europa. A continuación, pasea por el casco antiguo o Altstadt y contempla las coloridas casas -algunas con encantadores frescos- y quizás tomes otra comida ligera antes de embarcar en tu autocar de regreso a Zúrich.