Disfruta de las ofertas culturales de esta metrópoli, visita los edificios religiosos o practica portugués con los lugareños en discotecas o frondosos parques.
El interior dorado y azul del corazón espiritual de Montreal fascina tanto a visitantes como a peregrinos. Antiguamente era el lugar de culto más grande de toda Norteamérica.
Disfruta de una gran variedad de actividades al aire libre durante el verano y el invierno, y visita las capillas antiguas de este hermoso valle suizo en tus vacaciones en Funes.
Los paisajes oníricos, los fósiles de dinosaurios y las ciudades mineras históricas hacen de este valle un paraíso para paleontólogos, geólogos y cineastas.
Esta tumba-jardín imperial del siglo XVI, encargada nueve años después de la muerte del dirigente, es un ejemplo antiguo de la arquitectura mogol con piedra arenisca roja y mármol.
El sur de Nápoles es una zona increíblemente bella y su impresionante ruta costera se abre camino entre limoneros, viñedos y pueblos en lo alto del acantilado.
Esta impresionante catedral, ubicada en la Plaza Central de Morelia, ofrece un amplio abanico de estilos arquitectónicos y obras de arte excepcionales del siglo XVI.
Aprovecha tu visita a Brasilia para contemplar la extraordinaria e innovadora arquitectura de este bello edificio y, después, disfruta de exposiciones de arte, películas y obras de teatro.
Antigua capital del Imperio inca, esta ciudad histórica es la puerta de entrada al Valle Sagrado de los Incas y uno de los sitios más importantes de la cultura indígena peruana.
A esta montaña, que se eleva desde el mismo centro de la ciudad, se la conoce sobre todo por albergar la icónica estatua de Jesús, tan alta como un rascacielos.
Pasa tus vacaciones en la región de los Andes de Ecuador para contemplar las montañas más altas de este país mientras te relajas en un manantial de aguas termales y visitas uno de los mercados más famosos de Sudamérica.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.