La playa más famosa de Río de Janeiro es más que una extensión de arena, es el sitio donde los lugareños y los visitantes de todo el mundo van a relajarse, dejarse ver y pasarlo bien.
Explora el zoológico más antiguo de Brasil y el mayor museo de historia natural de Latinoamérica, o haz como los lugareños y relájate al sol en el césped de este célebre parque.
Disfruta de un concierto o un espectáculo de ballet en este edificio de cien años, que mantiene el brillo de principios del siglo XX gracias a una profunda renovación en 2008.
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Esta pequeña playa, considerada el lugar donde nació el surf brasileño, es también uno de los lugares más populares para ver los espectaculares atardeceres de Río de Janeiro.
En este parque, situado a los pies de la montaña Corcovado de Río, encontrarás una lujosa villa italiana, cuevas ocultas, kilómetros de rutas y vistas a la estatua del Cristo Redentor.
La playa más famosa de Río de Janeiro es más que una extensión de arena, es el sitio donde los lugareños y los visitantes de todo el mundo van a relajarse, dejarse ver y pasarlo bien.
La playa más famosa de Río de Janeiro es más que una extensión de arena, es el sitio donde los lugareños y los visitantes de todo el mundo van a relajarse, dejarse ver y pasarlo bien.
Nada en una bahía recóndita, sube colinas arboladas y saborea un marisco exquisito en los restaurantes situados junto a esta playa, uno de los secretos mejor guardados de Río.
El Museo Nacional de Bellas Artes cuenta con una amplia colección que incluye pinturas del siglo XIX y XX, obras de maestros europeos y piezas de arte africano.