Nada en una bahía recóndita, sube colinas arboladas y saborea un marisco exquisito en los restaurantes situados junto a esta playa, uno de los secretos mejor guardados de Río.
Esta pequeña playa, considerada el lugar donde nació el surf brasileño, es también uno de los lugares más populares para ver los espectaculares atardeceres de Río de Janeiro.
En este parque, situado a los pies de la montaña Corcovado de Río, encontrarás una lujosa villa italiana, cuevas ocultas, kilómetros de rutas y vistas a la estatua del Cristo Redentor.
El Museo Nacional de Bellas Artes cuenta con una amplia colección que incluye pinturas del siglo XIX y XX, obras de maestros europeos y piezas de arte africano.
Nada en una bahía recóndita, sube colinas arboladas y saborea un marisco exquisito en los restaurantes situados junto a esta playa, uno de los secretos mejor guardados de Río.