En los viajes a La Habana no puede faltar una visita al Malecón, un animado bulevar repleto de lugares de interés. Disfruta de las vistas del puerto por la tarde y únete después a la fiesta cuando se esconda el sol.
Déjate llevar por el encanto sencillo de esta ciudad portuaria a la que los turistas acuden por su costa y sus bosques pintorescos, que se pueden explorar a caballo o en tirolina.
Disfruta de un día de ocio en esta playa llena de servicios, donde encontrarás tiendas, restaurantes, cafés, bares y actividades acuáticas al alcance de tu mano.