El sur de Nápoles es una zona increíblemente bella y su impresionante ruta costera se abre camino entre limoneros, viñedos y pueblos en lo alto del acantilado.
Los paisajes oníricos, los fósiles de dinosaurios y las ciudades mineras históricas hacen de este valle un paraíso para paleontólogos, geólogos y cineastas.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.
La Isla Norte de Nueva Zelanda es un paraíso subtropical con playas cristalinas, bosques verdes y una oferta cultural impresionante. Un destino perfecto para cualquier momento del año.
La vista de este lago turquesa en el Valle de los Diez Picos ha sido inmortalizada en incontables postales y en el dorso de billetes de 20 dólares canadienses.
Disfruta de las ofertas culturales de esta metrópoli, visita los edificios religiosos o practica portugués con los lugareños en discotecas o frondosos parques.
Sus aguas azul cielo, montañas glaciares y la isla Spirit hacen de él uno de los puntos más emblemáticos de las Montañas Rocosas canadienses para ir a pescar o dar un paseo en barco.
Esta preciosa ciudad al sur de Italia situada frente al mar es conocida por sus antiguos edificios romanos, sus preciosos paisajes y un ritmo de vida relajado.
En esta apartada playa encontrarás aguas cristalinas, zonas de surf con un fuerte oleaje y playas de arena negra rodeadas de acantilados de color esmeralda y selva tropical.
Aprovecha tu visita a Brasilia para contemplar la extraordinaria e innovadora arquitectura de este bello edificio y, después, disfruta de exposiciones de arte, películas y obras de teatro.
El monte Rainier, tan grande que ha dado nombre a un parque nacional, es una montaña volcánica cubierta de nieve que resulta claramente visible desde Seattle.