Situados en la azotea de un edificio de siete plantas, Roof Gardens es un lugar excepcional para escapar del caos y la multitud de la ciudad. Pasea bajo árboles mediterráneos del jardín español (Spanish Gardens), escucha los cantos de los pájaros del jardín inglés (English Woodland Garden), y resguárdate del sol bajo las sombrillas del jardín Tudor (Tudor Garden).
Los jardines se diseñaron originalmente entre 1936 y 1938, bajo las instrucciones del vicepresidente de los grandes almacenes John Barker & Co. En sus inicios, la entrada se cobraba a un chelín y los beneficios se destinaban a fines benéficos. Actualmente, el acceso es gratuito.
En el jardín inglés encontrarás árboles muy viejos, como el arce rojo americano o el arce japonés, que aún perduran desde su plantación original, así como preciosas flores. Según el periodo del año, podrás ver muscari, galantos, narcisos e incluso jacintos. Este jardín también cuenta con un estanque en el que nadan patos y flamencos.
Descubre los árboles mediterráneos y las flores inglesas del jardín español. Pasea por el jardín Tudor a través del sendero homónimo y observa plantas propias de la época de esta dinastía. Esta época histórica se evoca también en los patios, los arcos y las paredes de ladrillo rojo. Unos parasoles en verano y una carpa en invierno protegen a los visitantes de las inclemencias del tiempo para que puedan disfrutar de los jardines en cualquier momento del año.
En el centro de los jardines se encuentra un club, en el que se celebran actos privados para los miembros de este. Tras dejar atrás las plantas y flores, detente a comer y a disfrutar de un cóctel en la terraza, o bien ve hasta el restaurante Babylon.
Esta joya se encuentra a un paseo de Hyde Park. Además, varias líneas de autobús prestan servicio y también hay una estación de metro en las cercanías. También se puede aparcar en algunos aparcamientos de pago de la zona.
La entrada a Roof Gardens es totalmente gratuita sin embargo, te aconsejamos llamar por teléfono para comprobar si están abiertos al público, puesto que a veces los cierran para celebrar actos privados. El restaurante está muy demandado, por lo que, si tienes pensado comer aquí, recuerda reservar tu mesa con antelación.